Una de las mejores formas de agradar en las comidas a la familia y los amigos es con un platillo de pasta. Ya sea como plato principal o como complemento, este alimento siempre queda ideal para un almuerzo o una cena.
Para hacer que la pasta sea cada vez más un platillo exquisito y más fácil de preparar, en Cocinaconina.com se pueden encontrar recetas que han sido desarrolladas especialmente para destacar los ingredientes de la región y despertar la curiosidad por nuevas combinaciones de sabores. Cada receta cuenta con un tutorial, con los pasos y tips para poder prepararlas de manera más fácil.
Para que la pasta quede realmente perfecta es necesario prestarle atención a varios factores, por eso, compartimos estos tips que serán de ayuda para sorpender a todos en casa al momento de preparar tu pasta favorita:
- Calcula las porciones adecuadas: la proporción correcta de agua por cada 100 gramos de pasta es de 1 litro de agua y 10 gramos de sal. Es importante que la pasta se mueva durante la cocción para evitar que se pegue. Además, puedes calcular una porción personal de pasta utilizando el puño cerrado de la mano para las pastas cortas y el orificio del utensilio con puntas especial para pastas largas.
- Verifica el tiempo de cocción en el paquete: hay muchos métodos para probar si la pasta está bien cocida, pero lo mejor que podemos hacer primero es leer el paquete. Este designa el tiempo de cocción recomendado. Los fideos largos y delgados tienden a cocinarse muy rápido, mientras que las pastas pequeñas y más densas tienden a tardar más. Otra forma es comenzar a probar la pasta unos dos minutos antes del tiempo indicado, solo para estar seguros. La mejor opción es que quede ‘al dente’.
- Mientras se cocina la pasta: aprovechar el tiempo para preparar la salsa con que se va a acompañar.
- Agrega la pasta ya cocida en el sartén de la salsa: agregar la pasta ya en su punto “al dente” al sartén de la salsa, dejándolo en el fuego por unos minutos más, hará que se impregne mejor el sabor.
- Pastas y salsas adecuadas: las pastas finas como el cabello de ángel o los espaguetis, son ideales para salsas más ligeras; mientras que las espesas como el linguini, los macarrones o los tornillos son mejores para un guiso abundante y espeso. Agregar diferentes texturas permiten que las salsas tengan también mejor sabor.
- A la hora de escurrir: escurre la pasta lo suficiente para eliminar la mayor parte del agua, pero no dejes que la pasta escurrida se asiente y se “seque”. A medida que se enfría, los almidones se endurecerán y la pasta se pegará. Reservar un poco de esta agua para que al calentar la pasta, tenga una consistencia más cremosa.
La pasta quedará mucho mejor al seguir estos tips, pero sobre todo, al poner en práctica todas las nuevas recetas que incentivarán la creatividad en la cocina para llenar la vida de momentos únicos y memorables.